XVIII VELORIO POÉTICO
Esta noche se ha celebrado el XVIII VELORIO POÉTICO. La noche ya era extraordinaria cuando he salido de casa, llovía tanto que la carretera del acantilado yendo a Almería ha habido desprendimientos y poco ha faltado para que cerrasen el paso. Cuando por fin llegué a Almería, entré a la Peña El Taranto, lugar de celebración, y se respiraba un ambiente muy familiar, domestico, cómodo.
Saludé a mis compañeros del evento, charlamos un rato, me acomodé en unamesa con amigos muy apreciados, pedí una cerveza y saqué mi tablet para leer la hoja de ruta y los poemas que llevaba preparados para recitar en mi turno.
El poeta invitado, Diego Mattarucco, me resultó una sorpresa, era un hombre muy vanguardista, de un estilo nuevo, fresco, simpático, y con un talento fuera de dudas incalculable. Su forma de recitar contribuyó a nuestro mejor bienestar.
Tuvimos la gran suerte que la persona encargada de deleitarnos con su música era una mujer con un virtuosismo incalculable con su acordeón, se me ha quedado grabada la versión extraordinaria de "Alfonsina y el mar".
A continuación llegó el turno de los poetas de degustación, y me tocó ser el primero. Lo hice bastante mal, porque, francamente no soy bueno en esa materia. Aunque he publicado cinco poemarios, debido a mi vida itinerante, nunca he recitado hasta ahora.
Entre el resto de poetas ha habido cosas muy bellas, variadas y hemos disfrutado también de una mujer muy polivalente y de un gran talento poético.
Todo ello se ha desarrollado en un ambiente de cordialidad, familiaridad, amistad y buen entendimiento. Y ha sido posible gracias a que personas como Perfecto Herrera Ramos se hayan ocupado de que nada saliese mal y no nos faltasen medios y ayuda.
Un gran evento para recordar y unas relaciones renovadas de mucha valía. Hasta la próxima.
DB
DB
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